domingo, 27 de noviembre de 2011

Un Día como hoy 28 de Noviembre

1822 
Muere en Morón (provincia de Buenos Aires), el poeta gauchesco Bartolomé Hidalgo, elogiado por Mitre y Borges. Nació en Montevideo (República Oriental del Uruguay) el 24 de agosto de 1788. 

Biografía
El poeta rioplatense Bartolomé José Hidalgo nació en Montevideo el 24 de agosto de 1788; sus padres fueron Juan Hidalgo y Catalina Jiménez, ambos argentinos. A raíz de la muerte de su padre, en 1800, debió enfrentar el mantenimiento de la familia. "Ya he dicho -afirma Hidalgo- que soy de una familia muy pobre, pero honrada; que soy hombre de bien y que esto es todo mi patrimonio." Nada se puede afirmar de su instrucción, salvo que debió participar de la impartida por los padres franciscanos, y su propia obra nos aproxima a su conocimiento de los neoclásicosespañoles, tanto los líricos como los dramáticos, de acuerdo con las exigencias del gusto de su época. En 1803 aparece como empleado de tienda de don Martín Artigas, el padre de su gran amigo y compañero,José Artigas, libertador y jefe de los patriotas uruguayos. Pasa luego a ser empleado del Ministerio de la Real Hacienda (1806), por su práctica contable, pero el 20 de enero de 1807 participa contra los invasores ingleses en la refriega de El Cardal, luego de haber sentado plaza en el batallón de milicianos. Vuelto a su puesto burocrático, en 1811 se vincula con los partidarios de Artigas, y llega a Paysandú y Salto, luchando contra los portugueses. Compone en esta fecha su "Himno Oriental", por cuya causa fue declarado 'benemérito de la Patria" por el Primer Triunvirato que formaban Chiclana, Sarratea y Paso.
El 30 de enero de 1816, se representó en la Casa de Comedias, su unipersonal 'Sentimiento de un patriota'; y, casi de inmediato, se le nombró Director del mismo teatro." Durante el período netamente artiguista, Hidalgo escribió un segundo unipersonal, "Idomeneo", cuya autenticidad se ha puesto en duda; la "Marcha Nacional", de 1816, al saberse la invasión de Lecor; y el "Cielito Oriental" contra los portugueses, en agosto de ese mismo año. El 27 de enero de 1817 entró Lecor al frente de las tropas portuguesas en Montevideo.
Hidalgo pasó a ser censor de la Casa de Comedias. Su situación se volvía insostenible en esas tierras y así decide en mayo radicarse en Buenos Aires. Aquí publica su "Cielito patriótico para cantar la acción de Maipú", y otro personal, "El triunfo".y año después su "Nuevo diálogo patriótico". El 26 de mayo contrajo matrimonio con una porteña,. Su mayor producción le sigue luego: "Cielito patriótico" ( del ejército libertador del Alto Perú) "Al triunfo de Lima y el Callao"; "Diálogo patriótico interesante"; hasta su última producción "Relación de las fiestas mayas", en 1822.Una afección pulmonar lo obligó a radicarse en el caserío de Morón, villa aún de verdes campos y limpia, pero la muerte lo llevó el 28 de noviembre, en una pobreza total. Su nombre no se refleja en los periódicos, y fue enterrado en el cementerio local; pero en el transcurso de los años su sepulcro no ha sido individualizado. Es que ha entrado en su tierra con la aureola del canto fresco y comunicador.." De un romanticismo evocativo y ampuloso es el siguiente enfoque que nos presenta Ricardo Rojas en su Historia de la literatura argentina: Tal se nos aparece la figura de Hidalgo, al entrar en la historia de la literatura nacional: vestido de chiripá sobre su calzoncillo abierto de cribas; calzadas las espuelas en la bota sobada del caballero gaucho; terciada, al cinturón de fernandinas, la hoja labrada del facón; abierta sobre el pecho la camiseta oscura, henchida por el viento de las pampas; sesgada sobre el hombro la celeste golilla, desafinada a servir de banderola sobre el enhiesto chuzo de lanceros; alzada sobre la frente el ala del chambergo, como si fuera siempre galopando la tierra natal: ennoblecida la cara barbuda por su ojo experto en las baquías de la inmensidad y de la gloria. Una guitarra trae en la diestra que tiempo atrás esgrimiera las armas de la epopeya americana' (Los gauchescos, II, p. 342, Buenos Aires, Losada, 1948)".
Allá va cielito y cielo
cielito de mi esperanza,
que vencen los imposibles
el amar y la constancia. 
Así también, de la tradición oral, y tomados por Ventura Lynch, una concordancia hacia el tema amoroso:
Oh, gallo, si tú supieras
lo que cuesta un buen querer
no cantabas tan aprisa
al tiempo de amanecer. 
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Obras




Obras
La obra de Hidalgo ha sido clasificada según sus géneros en Cielitos y Diálogos patrióticos. Un crítico -Tiscornia~ divide cronológicamente en dos períodos esta labor, llamando "poesía militante" a la que corre desde 1811 a 1816, y cuyo basamento sería la angustia personal, las pasiones que despiertan los sucesos civiles, y la actividad del poeta como partícipe de estos acontecimientos. La segunda parte, a la que denomina "poesía expectante" y que retiene lo mejor de su producción, abarca los años de 1821 a 1822. Allí su labor se ajusta al ejercicio de sus dotes líricas, ilustrando con piezas de mayor aliento su destreza como comentarista y la fuerza de su personalidad para el planteamiento de su tema. Son poemas de contenido fáctico, en los cuales el autor encarna la voz de sus iguales, su pueblo y su comunidad, y pertenecen a la misma categoría de los 'cielitos', que entonarán después Ascasubi o Luis Pérez en distintos bandos durante el rosismo. Es una poesía que vale como arma, por su contenido y funcionalidad política o bélica. Poesía que interviene en la realidad, que intenta transformarla o dirigirla en un sentido definido. Poesía nacida de un hecho histórico, para comentarlo, para incidir en él, para participar activamente en lo láctico: oponiéndose, corrigiéndolo, aprobándolo. Aquí debemos incluir los 'cielitos' de 1812 y 1814, que se gritaban de trinchera en trinchera durante el primer sitio de Montevideo. También el 'Cielito' contra los portugueses de 1816; respuesta, de 1820, al Manifiesto de Fernando VII; 'Cielito' de 1819 y, finalmente, el primer 'Diálogo patriótico', con sus notas de crítica social y de sátira al robo de los caudales públicos. A excepción del "Cielito' de 1819 (público doble: las autoridades y los hombres de su clase) todos estos textos van dirigidos fundamentalmente a los hombres de la campaña, los que componen los ejércitos patrios del momento". Es lógico suponer entonces que Bartolomé Hidalgo, por ser el iniciador de la poesía gauchesca, debió encontrar dificultades expresivas que asumió con plena conciencia y que se propuso superar. De gran importancia, en primer lugar, era el público o los oyentes a quienes se dirigía, pues lo habitual era el contacto por vía oral, produciéndose sólo en un momento posterior la difusión de los cielitos mediante hojas voladoras.. La patria necesitaba una expresión directa y clara, para lo cual el cielito le sirvió como medio directo de información y comunicación. No puede afirmarse que Hidalgo sea el inventor del cielito, ya que se conocían en la campaña una danza de este nombre y su música con anterioridad a 1810. El cielito proviene de su estribillo, "cielo, cielito, cielo", con numerosas variantes en su formación lírica, y así lo aclaraAugusto Raúl Cortazar en su estudio sobre Los cielitos patrióticos, expresión folklórica del alma argentina. En su primera época, su letra tuvo acentos sentimentales, como puede comprobarse en una copla que recogió Juan Alfonso Carriza en Tucumán:
"Himno Oriental".
'Sentimiento de un patriota'.
"Marcha Nacional".
"Cielito Oriental".
"Cielito patriótico para cantar la acción de Maipú".
"El triunfo".
"Nuevo diálogo patriótico".
'Diálogo patriótico'.
"El Argos".
"Cielito patriótico".
"Al triunfo de Lima y el Callao".
"Diálogo patriótico interesante".
"Relación de las fiestas mayas".
El cielito militante: "Escuchado el primer cielo militante y conocido el éxito que lo consagró en la campaña y en los campamentos, surgieron multitud de letras anónimas que se distribuían en hojas sueltas, volanderas, y que siempre o casi siempre fueron escritas, como advierte Juan María Gutiérrez, por la misma mano culta que acababa de escribir una oda o un himno". La Gaceta de Buenos Aires reprodujo en sus columnas algunos de estos cielitos, y la famosa antología publicada en 1824 con el título de Lira Argentina dio cabida en sus páginas a dos de estas composiciones.:En otro aspecto, Hidalgo intenta, con sus producciones finales de 1821-1822, una aproximación al diálogo o la entonación, elemento fundamental de lapoesía gauchesca. Así lo ha dejado apuntado en un ensayo (Cielitos y diálogos patrióticos) Horacio Jorge Becco: "Hidalgo debió advertir ese descubrimiento de la voz del canto, pero ese descubrimiento le fue dado, a juzgar por los distintos procesos que va sufriendo su obra, por la vitalidad de un lenguaje peculiar y propio; ya que esa misma desnudez idiomática le servía para examinar cómo sus versos eran colectados en provechoso triunfo por lectores primitivos. La valoración de sus 'Diálogos' no provenía simplemente de un desarrollo más o menos oportuno y feliz; residía principalmente en haber logrado la forma verbal de contarlos. El primero de sus 'Diálogos' presenta a Jacinto Chano (capataz de una estancia en las islas del Tordillo) y al paisano Ramón Contreras (gaucho de la Guardia del Monte). Es una pieza sin útiles grotescos, con cierta emocionada y dolorosa visión. Es un evocar los años de contienda, con sangrientos desencantos, donde han luchado por una libertad y una confraternidad entre hermanos que no llega a producirse.
"El 'Nuevo diálogo" dirá, con variantes sobre el tema más constante de Hidalgo, la unión de los americanos y las luchas por la libertad. Similares asuntos aparecen en sus cielitos, como el manifiesto de Fernando VII, distintos sucesos de episodios de la guerra gaucha, el perdón de Belgrano a los vencidos en la batalla de Salta, la soldadesca corajuda, al enemigo topando, / el poncho a medio envolver / y el alfajor en la mano'. Este instrumento de pelea vuelve a evidenciar el constante estado de alerta en el paisano, dispuesto a combatir de continuo, poniendo su corazón en Dios' y en los ideales de patria grande, lo que vio en las fiestas Mayas de Buenos Aires, en 1822 la pieza más celebrada y ejemplificada de su labor poética. Como su titulo lo informa, el diálogo cubre con simpatía la colorida descripción de las fiestas mayas, siguiendo firmemente la realidad de todos los días desde la noche del 24 de mayo, influyendo la ornamentación de la plaza, las inscripciones de la pirámide, . la música y los cantos, los fuegos artificiales, la ceremonia oficial, los honores militares, el pueblo reunido, las funciones teatrales y los bailes, el gracioso palo enjabonado y los rompecabezas, el asombro por las mujeres, las carreras de sortija, etc. Esta labor del poeta concuerda con los testimonios que hallamos en El Argos, en las muestras palpables de nuestra mejor iconografía, sobre la ciudad de Buenos Aires, en los viajeros como 'Un inglés', y en los cronistas posteriores a esa fecha." Como nota final sobre este asunto, agrega Becco un magnífico resumen que ofrece Augusto Raúl Cortazar: "Los tres diálogos tienen elementos comunes en su estructura, fondo y formas. Jacinto Chano y Ramón Contreras son los únicos interlocutores; a modo de introducción se relatan siempre episodios que tienen por eje el caballo, que ocupaba, en efecto, un primer plano en el mundo mental del gaucho. Las visitas, hechas y retribuidas a pesar de la distancia que separa a los amigos, son motivo para mostrar actitudes, costumbres, modos de comportamiento del gaucho, que se entrelazan con la exaltación de las glorias guerreras y los ideales ciudadanos. Idénticos sentimientos animan a los tres poemas: el amor a la patria sobre todos, y como consecuencia el ansia ardorosa, y por momentos conminatoria, de unión, de concordia, de justicia y libertad. No se expresan como invocaciones abstractas y palabreras, sino que fluyen naturalmente de los temas propios de una conversación de gauchos y se apoyan en la referencia a los sucesos candentes del momento. 
Biografía

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Bartolomé Mitre
(1821 - 1906)
Autor: Felipe Pigna
Bartolomé Mitre, el gran historiador, polémico político e impulsor de la organización nacional, nació en Buenos Aires el 26 de junio de 1821. Era hijo de Don Ambrosio Mitre y Doña Josefa Martínez. El matrimonio se estableció en Carmen de Patagones y allí nacerían los hermanos de Bartolomé, Emilio y Federico. Sus primeros estudios los realizó entre Buenos Aires y Carmen de Patagones.
A los 14 años, Mitre comienza a trabajar en una de las estancias de Rosas, "El rincón de López", regenteada por Gervasio Rosas, hermano del restaurador. El joven Mitre no logra adaptarse a la férrea disciplina de la estancia y es devuelto por Rosas a su padre con estas palabras: "Dígale a Don Ambrosio que aquí le devuelvo a este caballerito, que no sirve ni servirá para nada, porque cuando encuentra una sombrilla se baja del caballo y se pone a leer". Un año después ya había escrito su primera colección de poesías. Mitre tenía 17 años. Frente a las persecuciones del rosismo, emigra junto a su familia a Montevideo. Allí conocerá a Delfina de Vedia, una bella uruguayita que se convertirá en su esposa y compañera.
"Delfina se presentó a mis ojos como un ángel descendido de los cielos", escribirá por entonces. Se casaron el 11 de enero de 1841 y tuvieron cuatro hijos: Delfina, Josefina, Bartolomé y Emilio.
En Montevideo inició su carrera militar en el arma de artillería sin abandonar su pasión por las letras expresada a través de sus notas en los periódicos El iniciador y El Nacional entre los años 1838 y 1839.
En 1842, se incorporó a las filas antirrosistas del general Paz y participó en la campaña de Entre Ríos hasta que, derrotadas sus fuerzas en Arroyo Grande, debió regresar a Montevideo.
En la capital uruguaya tomó contacto con los intelectuales antirrosistas emigrados, como José Mármol, Florencio Varela, Rivera Indarte y Esteban Echeverría y participó activamente en la defensa de Montevideo, sitiada por Oribe. Su destacada actuación le valió el ascenso a Teniente Coronel en 1846. Pero ese mismo año decidió abandonar el Uruguay, disgustado con la política de Rivera. Se trasladó a Bolivia donde el presidente Ballivián lo puso al frente del Colegio Militar. Allí también ejerció el periodismo, junto a Wenceslao Paunero y Domingo de Oro, y fundó el diario antirrosista La Epoca.
Un golpe de estado derrocó al presidente Ballivián y Mitre debió trasladarse primero al Perú y finalmente a Chile, donde residirá hasta 1851.
En ese año, se trasladó a Montevideo y, al enterarse del pronunciamiento de Urquiza, se incorporó al Ejército Grande como jefe de artillería. Tras el triunfo de Caseros, en 1852, fundó Los Debates, diario desde el que fijaría su postura en defensa de los intereses porteños frente al proyecto de Urquiza. Esto le valió el cierre del periódico y un nuevo exilio en Montevideo. Pero pronto podrá regresar a Buenos Aires. El 11 de septiembre de 1852 los sectores porteños opuestos a la nacionalización de las rentas aduaneras y la hegemonía de Urquiza, organizan un movimiento que tiene en Mitre y Valentín Alsina a sus principales referentes. La "revolución" del 11 de septiembre produjo la separación de la provincia de Buenos Aires del resto del país, con Valentín Alsina como gobernador y Mitre como ministro de Gobierno y encargado de las relaciones exteriores.
Posteriormente, en 1855, sería electo presidente de la legislatura bonaerense, y fundaría el instituto Histórico y geográfico.
En 1857, publicó la primera edición de su Historia del General Belgrano, obra exhaustiva, producto de una profunda investigación.
Mientras tanto, Buenos Aires gozaba de cierto bienestar económico; su economía se iba dibujando alrededor de un puerto que exportaba cereales y ganado e importaba de Europa todo lo demás, desde manufacturas hasta ideas políticas. Así, mientras la Confederación languidecía, Buenos Aires progresaba con un ritmo acelerado. Una moneda fuerte, aceptada en todo el territorio provincial, otorgaba garantías a los capitales extranjeros. La exportación lanera figuraba entre las primeras del mundo.
Hacia 1857, se inaugura el Ferrocarril del Oeste, primer tren del país. Unía la Estación del Parque -hoy Plaza Libertad- y el actual barrio de Flores.
La Ciudad dejaba el mote de "gran aldea" para transformarse, lenta pero inexorablemente, en la "París del Plata".
Como militar participará con el grado de General en los dos combates contra Urquiza: la derrota de Cepeda en 1859 y la victoria definitiva de Pavón, el 17 de septiembre de 1861.
Mitre que había sido electo gobernador de Buenos Aires en 1860, se transformó tras el triunfo de Pavón en el único hombre en condiciones de encauzar los destinos del país recientemente unificado.
En mayo de 1862, se reunió un nuevo congreso nacional que legitimó la situación de Mitre confirmándolo como encargado del Poder Ejecutivo Nacional. Se convocó a elecciones nacionales y triunfó la fórmula Bartolomé Mitre y Marcos Paz.
Los nuevos mandatarios asumieron en octubre de 1862 y pronto tropezaron con el primer obstáculo.
El problema de la federalización de la provincia y de la residencia de las autoridades nacionales, pudo resolverse transitoriamente a través de la Ley de Compromiso, por la cual los miembros del poder ejecutivo podrían residir en Buenos Aires hasta tanto se fijase la capital definitiva de la república.
En el transcurso del debate de la ley, quedaron claramente manifiestas las dos tendencias del liberalismo porteño; los nacionalistas o mitristas, llamados "cocidos" continuadores de la política de Pavón y los autonomistas, liderados por Adolfo Alsina, llamados "crudos", pretendían conservar los privilegios de Buenos Aires, particularmente las rentas aduaneras.
Estos nuevos partidos representaban en realidad a la misma clase social y tenían como objetivo casi exclusivo la toma del poder para usufructuar el aparato estatal.
En este período se produjo una creciente centralización del poder político donde el uso de la fuerza fue determinante.
El gobierno nacional se fue imponiendo a través de la violencia organizada por sobre otros poderes como los de las provincias, centralizando funciones como la recaudación impositiva, la emisión monetaria, la educación y la represión.
La verdadera institucionalización de un ejército nacional ocurrió a través de las distintas formas de enfrentamiento asumió ese ejército nacional. El ejército implicó, además, un enorme gasto público que llegó a representar en algunos años más del 50 % del presupuesto.
Mitre encargó a un grupo de juristas encabezados por Dalmacio Velez Sarsfield la redacción del Código Civil y la adaptación del Código de Comercio al ámbito nacional.
Se organizaron la Corte Suprema de Justicia y los tribunales inferiores.
Como elemento de unificación ideológica se crearon los 14 colegios nacionales y sus respectivos profesorados, uno para cada provincia.
Era imposible llevar adelante la política centralizadora sin terminar con el caos fiscal y la anarquía monetaria: en algunas provincias se superponían impuestos y circulaban tres y hasta cuatro monedas diferentes.
La creación de un aparato recaudador nacional fue condición necesaria para financiar las reformas que requería la concreción del programa liberal mitrista.
Durante su mandato, Mitre fue urdiendo una política de alianzas con los sectores conservadores del interior buscando subordinar a las provincias a los intereses porteños. Esta política provocó levantamientos armados como el de los montoneros acaudillados por el riojano Ángel Vicente Peñaloza, "El Chacho", en 1863, que culminarán en violentas acciones represivas por parte del ejército nacional.
En 1865, estalló la Guerra del Paraguay (o Guerra de la Triple Alianza) y Mitre fue designado General en Jefe de las Fuerzas Aliadas de Argentina, Uruguay y Brasil.
Mitre había hecho un pronóstico demasiado optimista sobre la guerra: "En 24 horas en los cuarteles, en 15 días en campaña, en tres meses en la Asunción." Pero lo cierto es que la guerra duró casi cinco años. La victoria le costó al país más de 500 millones de pesos y 50.000 muertos. Del millón trescientos mil habitantes que tenía el Paraguay, sólo sobrevivieron 300.000, la mayoría mujeres y niños.
La impopularidad de la Guerra de la Triple Alianza -llamada de la Triple Infamia por Alberdi- sumada a los tradicionales conflictos generados por la hegemonía porteña, provocó levantamientos en Mendoza, San Juan, La Rioja y San Luis. El caudillo catamarqueño Felipe Varela lanzó una proclama llamando a la rebelión diciendo:
"Ser porteño es ser ciudadano exclusivista y ser provinciano es ser mendigo sin patria, sin libertad, sin derechos. Ésta es la política del gobierno de Mitre. Soldados Federales, nuestro programa es la práctica estricta de la Constitución jurada, el orden común, la amistad con el Paraguay, y la unión con las demás repúblicas americanas."
A pesar de que contaba con un importante apoyo popular, Varela fue derrotado por las fuerzas nacionales en 1867. Como decía la zamba de Vargas, nada podían hacer las lanzas contra los modernos fusiles de Buenos Aires.
En 1868, culminó su período presidencial y se declaró prescindente en cuanto a apoyar a un candidato a sucesor, dejándole de esta manera el campo libre a Domingo Faustino Sarmiento, quien asumirá ese año la primera magistratura. Mitre, por su parte, fue electo senador por Buenos Aires. En 1869 compró el diario La Nación Argentina, fundado por Juan María Gutiérrez en 1862, y lo convirtió en La Nación, cuyo primer número salió a la calle el 4 de enero de 1870, mientras se libraban los últimos combates de la Guerra del Paraguay, con una tirada de mil ejemplares.
En 1871, como muchos porteños, cayó enfermo de fiebre amarilla. Tras su recuperación el presidente Sarmiento le encomendó una misión diplomática en Brasil para terminar de definir los límites modificados tras la Guerra del Paraguay.
En 1874, se presentó nuevamente como candidato a la presidencia. Ante el triunfo del tucumano Nicolás Avellaneda, denunció fraude y se sublevó contra las autoridades electas pero fue derrotado por las tropas leales, dirigidas por el coronel Julio A. Roca. Fue detenido y trasladado al Cabildo de Luján. Durante sus cuatro meses de prisión escribió el prólogo para su Historia de San Martín y de la independencia sudamericana.
Tras dedicarse a sus investigaciones y a la labor periodística, en 1890, volvió a la acción. La desastrosa administración de Juárez Celman, con su estela de negociados y corrupción, fomentó la unión de la oposición en un gran frente conocido como la Unión Cívica, bajo la conducción de Bartolomé Mitre y Leandro N. Alem.
El 26 de julio de 1890, la Unión Cívica decidió pasar a la acción. Estalló la "Revolución del Parque". Mitre decidió ausentarse del país, dejándole todo el peso de la conducción del movimiento a Alem, quien, a pesar de contar con cierto a poyo militar, fue derrotado.
Este hecho y las negociaciones posteriores concretadas por Roca y Mitre, que desembocaron en la renuncia de Juárez Celman y la asunción de Carlos Pellegrini, fueron vistas por Alem como una traición a los postulados de la Revolución del ’90. Esto condujo a la ruptura de la Unión Cívica en dos nuevos partidos: la Unión Cívica Nacional, encabezada por Mitre, y la Unión Cívica Radical, encabezada por Alem.
Mitre influyó decisivamente a través de su prestigio político y de su diario en los gobiernos que se sucedieron entre 1890 y 1906, el año de su muerte. Nada se hacía en las filas conservadoras sin consultar a "Don Bartolo", que se reservaba la última palabra.
En 1894, fue electo nuevamente senador nacional y participó activamente en los debates sin dejar de lado la escritura. Publicó por esos años su Estudio bibliográfico-lingüístico de las obras del Padre Luis de Valdivieso sobre el araucano.
En 1901, al cumplir 80 años fue objeto de grandes homenajes y festejos. Pasó sus últimos años dedicado a la dirección de La Nación y a la traducción de La divina comedia de Dante Alighieri. Falleció a los 84 años el 19 de enero de 1906. Una multitud acompañó sus restos hasta la Recoleta.
Fuente: www.elhistoriador.com.ar
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1967 
Muere el compositor y director de orquesta Héctor Panizza, autor de las óperas "Aurora"(1908), una parte de la cual se canta al izarse la Bandera Nacional, y "Bizancio" (1939). Nació en Buenos Aires el 12 de agosto de 1875.  


Héctor Panizza

Héctor Panizza
Hector Panizza.jpg
Nombre completoHector Panizza
Nacimiento12 de agosto de 1875
Buenos AiresArgentina
Fallecimiento27 de noviembre de 1967
MilánItalia
NacionalidadBandera de Argentina Argentina
ÁreaCompositorDirector de orquesta
Héctor Panizza (en Italia Ettore Panizza) (Buenos AiresArgentina; 12 de agosto de1875 - Milán, Italia, 27 de noviembre de 1967) fue un compositor y director de orquesta argentino de trascendencia internacional. Uno de los máximos directores de ópera de la primera mitad del siglo XX es básicamente asociado con el Teatro Colón (Buenos Aires),La ScalaCovent Garden, Chicago y el Metropolitan Opera; compuso cuatro óperas entre ellas la popular Aurora (ópera).

Contenido

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[editar]Trayectoria

Estudió primero con su padre (chelista de la orquesta del Teatro Colón) y luego en el Conservatorio de Milán y debutó en Roma en 1897, dirigiendo luego por toda Italia, España y Sudamérica.
En 1916 dirigió en Turín el estreno mundial de Francesca da Rimini de Riccardo Zandonai.
Arturo Toscanini lo contrató como director musical de La Scala entre 1921-29 y 1930-32 ( Arturo Toscanini fue el primero en dirigir la inconclusa Turandot dejada por Puccini con el final compuesto por Franco Alfano) y la [[Lyric Opera of Chicago]] entre 1922-24.1
En el Metropolitan Opera de Nueva York sucedio a Tullio Serafin. Debutó en 1934 y permanecio por ocho temporadas dirigiendo 26 óperas y 231 funciones, trabajando conRosa Ponselle y Enrico Caruso entre otras estrellas del firmamento lírico de la era.
Como compositor escribió la trilogía del medioevo italiano con libro de Luigi Illica, la ópera Aurora con libreto de Illica y Héctor Quesada, estrenada en la temporada inaugural del Teatro Colón en 1908 (y repetida la siguiente con la diva rumana Hariclea Darclée) y la óperaBizancio estrenada en el Colón en 1939.
Panizza actuó en el Teatro Colón en 1908, 1909, 1921, 1927 (dirigiendo entre otras a Claudia Muzio en Tosca y La Bohème), 1929 (Turandot con Rosa Raisa y Georges Thill y Madama Butterfly con Gilda dalla Rizza entre otras), 1930, 1934 (El barbero de Sevilla conTito Schipa y Lily PonsCarmen con Gabriela Besanzoni), 1935, 1936, 1939 (Borís GodunovLa Traviata con Bidú SayaoMacbeth con Alexander von Sved y Hina Spani, Turandot, Aida y el estreno de su opera Bizancio las tres con Gina Cigna), 1942 (Aida y Simón Boccanegra con Zinka Milanov y Leonard Warren), 1943 (Falstaff con Leonard Warren, etc), 1944 (Bizancio con Delia Rigal), 1945(Aurora con Delia Rigal), 1946, 1947(Tosca y Andrea Chénier con Maria Caniglia y Beniamino Gigli), 1948, 1949, 1951, 1952 (Madama Butterflycon Victoria de los Ángeles entre otras), 1954 y 1955.2
Aurora fue repuesta en el Teatro Colón en 1965, 1966, 1983 y 1999.3 Se lo recuerda preferentemente como el autor del saludo a la bandera argentina extractado de su ópera Aurora.
Estrenó mundial y localmente varias óperas de Gian Carlo MenottiErmanno Wolf-Ferrari, y otros contemporaneos.
Fue el primero en registrar la version italiana de Borís Godunov en la orquestacion de Rimski-Korsakov con Ezio Pinza.
Su influencia con Toscanini ayudó al lanzamiento de las carreras internacionales de varias estrellas de la lírica, entre ellos la soprano británica Eva Turner y el director Antonino Votto.
En 1952 publicó su autobiografia "Medio siglo de vida musical".

[editar]Discografia

  • Verdi - Otello - Giovanni MartinelliElisabeth Rethberg - Metropolitan Opera 1938, Naxos
  • Verdi - La Traviata - Rosa Ponselle, Fredrick Jagel, Lawrence Tibbett - Metropolitan Opera
  • Verdi - La Traviata - Bidú Sayão, Bruno Landi, Thelma Votipka, Alessio De Paolis, 1942
  • Verdi - Simon Boccanegra - Elisabeth Rethberg, Giovanni Martinelli, Lawrence Tibbett, Ezio Pinza, Leonard Warren. Met 1939
  • Verdi - Aida - Zinka Milanov, Arthur Carron, Richard Bonelli, Bruna Castagna, Norman Cordon; 1939
  • Verdi - Il Trovatore - Stella Roman, Bruna Castagna, Arthur Carron (o Charles Kullman), Norman Cordon; 1941
  • Verdi - Un Ballo in Maschera - Stella Roman, Giovanni Martinelli, Bruna Castagna, Josephine Antoine, Norman Cordon, Nicola Moscona; 1942
  • Ponchielli - La Gioconda - Zinka Milanov, Giovanni Martinelli, Metropolitan 1939
  • Puccini - Madama Butterfly - Licia Albanese, Charles Kullman, Irra Petina; 1941
  • Puccini - Tosca - Grace Moore, Frederick Jagel, Alexander Sved, 1942
  • Mendelssohn-Boero - Symphony 4; excerpts opera El Matrero4
  • Mozart - Le Nozze di Figaro. Ezio Pinza, John Brownlee, Licia Albanese, Jarmila Novotna, Elisabeth Rethberg - Metropolitan 1940

[editar]Referencias

  • R. Mancini and J-J. Rouvereux, ed (1986). Le guide de l'opéra. Fayard. ISBN 2-213-01563-6.

[editar]Enlaces externos

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AURORA
Letra de H.C. Quesada y L. Illica
Música de Héctor Panizza




Alta en el cielo, un águila guerrera
audaz se eleva en vuelo triunfal;
azul un ala del color del cielo,
azul un ala del color del mar.




Así en la alta aurora irradial,
punta de flecha el áureo rostro imita,
y forma estela al purpurado cuello.




El ala es paño, el águila es bandera.
Es la bandera de la patria mía,
del sol nacida, que me ha dado Dios;
es la bandera de la patria mía,
del sol nacida, que me ha dado Dios;
es la bandera de la patria mía,
del sol nacida que me ha dado Dios.

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